He fallado.
Yo soy el que no he cumplido.
Mi viga no me ha impedido que vea la paja de mi hermano. Es más ni me causa molestia.
Mi organización está sobre tú espontaneidad.
He escuchado al hombre y no a ti.
Tu gran comisión, la he utilizado para distinguirme como un grupo minoritario, a veces de iluminados, que viven aislados.
He escuchado a los que me siguen y no a los que te siguen.
Le he dado oportunidad a los que me siguen y no a los que te siguen.
Me he convertido a ellos y no ellos a mí. Yo no me he convertido a tí.
El yugo que impuesto ni es fácil ni ligero, el tuyo si lo es.
He presentado a un Dios hecho al alcance de la Teología y no a un Dios que es libre.
He sido fuerte pero no he dejado perfeccionar tu poder, quisiera ser débil pero que tú estuvieras conmigo.
Me he encerrado para no contaminarme tanto que no he salido para limpiar lo más profundo de mi corazón.
Prefieros ser juzgado como Barrabás ante los demás, a estar en tu lugar.
Me he alejado del mundo sin embargo estoy más alejado de ti.
Las denominaciones, tendencias, clasificaciones y pertenencias no me han dejado conocer tu palabra completa.
Teológicamente estoy en espera de otra dispensación.
He estado atraído más por tu poder que por lograr una verdadera conversión.
El mundo aún cuando está apartado de ti, no te conoce.
Me formado y he aprendido del hombre, antes de aprender y ser formado por tí y tu palabra.
Mi autoridad y mi palabra, han estado sobre tu autoridad y tu palabra, que van a decir de mí.
No he ensuciado mis pies, porque no he salido. Sin embargo necesito que limpies todo mi cuerpo.
He formado personas a mi imagen y semejanza, y no a la tuya.
Mi celo por ti, se convertido en mi celo por mí.
Te he tratado de agotar con conocimiento humano, cuando tú eres infinito.
He aprendido a agradar a lo demás, más que a tí. No he quedado bien contigo.
La unidad en congresos, seminarios, eventos, campañas han tenido un interés personal más que una convicción de servicio.
Mis libros, discos, folletos, páginas web, programas de televisión, blogs, no los he hecho para que el mundo te conozca, sino para un segmento de mercado.
Mi rebelión es incompatible con tú revelación.
He buscado más el avivamiento, que un verdadero arrepentimiento…
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Señor perdóname, límpiame de mi trangresión... dame un espíritu y corazón nuevo de acuerdo a lo que tú eres…dime que estás aún conmigo…
P.D. Esta lista es enunciativa más no limitativa se aceptan aportaciones.
Una confesión muy sincera y valiente!
ResponderEliminarEspero que la mía un día quede en blanco...
Me hace recordar uno de mis pasajes favoritos, Salmos 51, especialmente del 10 al 12.